Sighisoara es para muchos la ciudad con mayor encanto y esencia de Rumanía, ya que tanto su ubicación en plenas montañas de los Cárpatos, como su disposición en una colina fortificada y su intacta arquitectura de influencia germánica, hacen que parezca una ciudad-fortaleza infranqueable de cara al exterior, y sin embargo, el casco urbano medieval posee un aspecto casi mágico, con su trazado irregular, sus entresijos, pasadizos, pendientes y pasadizos. Considerada cuna del famoso Vlad Tepes, ya que se supone que allí se encuentra la casa natal de este ilustre personaje, fue además uno de los principales asentamientos de los colonos sajones que se instalaron en Transilvania, y por tanto su arquitectura de marcado carácter centroeuropeo es una de la más bellas y originales, marcada por sus altas torres de aguja que configuran el paisaje urbano.
Visita panorámica |
Durante la visita panorámica a pie de la ciudad, nos adentraremos por sus calles empedradas, llenas de desniveles y pendientes, que realzan su singular belleza, veremos los arcos y las altas torres de defensa que configuran la imagen de esta ciudadela. Destacan la Torre del Reloj – símbolo de la ciudad - , la Iglesia de la Montana o la casa natal de Drácula, donde se supone que nació este famoso personaje |